domingo, 30 de marzo de 2014

No demores la felicidad



Don’t let others dictate your life or influence what you know in your heart is the right decision. I know it’s not easy to ignore such negative reactions, but you must push forward. (No permitas que otros dicten tu vida o sean influencia sobre lo que sabes en tu corazón que es la decisión correcta. Yo sé que no es fácil ignorar esas reacciones negativas, pero debes empujar hacia adelante)

Hace unos meses me topé con el blog de este Nómada Feliz, me intrigo tanto su historia que me puse a leer sus entradas desde sus inicios en el 2009 hasta los más recientes del presente año. A mitad de mi lectura bloguera, me dieron las ganas de déjalo todo e irme a viajar por el mundo. No sé si fue la emoción del momento, o si mi corazón muy en el fondo busca esa aventura que muchos llamarían “guajira”. Me dio gusto saber que había gente allá afuera que tiene esa filosofía de vida.  Y bueno, reflexionando sobre lo leído llegué a algunas conclusiones con respecto a la felicidad:

La felicidad está en el ojo del espectador. A veces juzgamos con tal facilidad las decisiones que otras personas han tomado en su vida e incluso cuestionamos su nivel de felicidad. Si bien, el juzgar es parte del ser humano, a veces lo hacemos inconscientemente a partir de nuestras propias ideas de la felicidad. Entonces supongo que tiene sentido, el que tengamos la tendencia a basar nuestro conocimiento de la felicidad de acuerdo a nuestras propias experiencias. Sin embargo, en la vida todos hemos escogido un cierto camino que nos lleva a tener distintas experiencias.

Esta el "camino común" que la sociedad , nuestras familias o nuestras culturas fuerzan en nuestros cerebros. Todos estamos "programados" para ser de cierta manera y para llevar una cierta vida. El más valiente de nosotros es aquel que decide tomar el camino que mejor se adapte a sí mismo sin importar el “qué dirán”.  Este camino puede no ser el más original del mundo, en cuanto a caminos van, puede no ser el más aventurado, pero es NUESTRO camino a tomar, NUESTRA vida a experimentar.

Puede que demos a la gente consejos o críticas con respecto a su vida basándonos en nuestros propios ideales, mientras que rara vez tomamos en cuenta la perspectiva de la otra persona. La próxima vez que escuchemos a alguien hablando de su vida y nos cuente de lo felices que son, hay que tener en cuenta su perspectiva de la vida y lo que hace que esa persona sea feliz. No nos apresuremos a juzgar. Tengamos la mente abierta a la diversidad de pensamiento. Quien eres tú, para decirle a alguien que su forma de vida no es la adecuada? Quien eres tú, para creer que solamente tus ideas son las correctas? No hablo de limitar la libertad de expresión, finalmente cada quien puede decir lo que se le pegue la gana; pero una cosa es expresar nuestras ideas civilizadamente y otra cosa es querer imponerlas.“Success is living in active pursuit of what you truly want in life, not what others want for you.” (Exito es vivir en la busqueda activa de lo que verdaderamente quieres en la vida, no lo que otros quieren para ti)



La felicidad es algo que no se puede encontrar, se crea dentro de nosotros mismo. El error más grande que he observado en la gente es la creencia de que un bien material hará su vida feliz, e irónicamente ponen su "ser feliz" a un lado hasta que lo adquieren. Peor aún, podemos caer en el “horror” de poner requisitos generales al “ser feliz” impuestos por los ideales y las inseguridades que hemos adquirido a lo largo de nuestras vidas. Nos decimos a nosotros mismos: "Voy a ser feliz una vez que tenga ese nuevo trabajo, marido, hijos, carrera, cuerpo ideal ... "  Esta bien ponerse metas. Pero, ¿qué pasa mientras tanto?

Rebeca una vez me hizo una pregunta que en primer instancia me causo molestia, pero que meditando al respecto tenía de por medio una clara verdad: "Quieres hacer esto o aquello, de acuerdo. Qué es lo que te de tiene?" Nosotros mismos truncamos nuestro avance, saboteamos el camino que sabemos nos hará felices. 

La vida es demasiado corta como para retrasar el “ser feliz”. No es necesario llevar una vida emocionante de lunes a viernes, tampoco derrochar positivismo y motivación sin cesar. Hagamos las cosas que nos hacen felices a diario, podría ser algo tan simple como escribir, o escuchar una canción favorita y cantar a todo pulmón, o disfrutar de una buena taza de café aunque sean las 6pm. Hagamos lo que nos hace felices y no lo que se espera que nos haga felices.

No demoremos la felicidad, porque la vida se pondrá al día con nosotros cuando menos te lo esperes y habrá pasado tan rápido como un abrir y cerrar de ojos.


That’s being smart, that’s being courageous, that’s making the absolute most out of your short time on this planet. (Eso es ser listos, eso es ser valerosos, eso es hacer lo máximo de tu corto tiempo en este planeta) -Derek (@wanderingearl)

Lisa A.

lunes, 24 de marzo de 2014

Quién?


Hola.

Soy Rebecca, de la que los otros dos hablan en algunas de sus entradas; y por fin, me doy el tiempo de escribir aquí. Hay mucho y a la vez tan poco de lo que he estado pensando compartir con ustedes, como Lisa explicó estoy viviendo fuera de mi país y ha sido una experiencia loquísima en todos los sentidos.

Me detienen de escribir aquí la falta de organización en mis tiempos, la falta de inspiración, la poca experiencia en blogs y, lo acepto, el miedo a que nadie me lea. Pero si alguien me lee y además le sirven de algo mis palabras, por favor hágamelo saber para no renunciar.

Y pues tal parece que mis amigos que tanto se rehúsan a caer en los brazos del amor, están muy en ánimos de escribir acerca del mismo todo el tiempo. Por eso, me dedico a seguir con éste tan largo, profundo y escandaloso tema.

Ayer escuche un mensaje sobre cómo nuestras decisiones actuales afectan vidas, muchas vidas. Por pequeñas que parecen ser algunas de éstas decisiones, terminarán afectando a las generaciones que vienen después de nosotros. Porque al final de cuentas, muchas cosas que vivimos y experimentamos en nuestra vida fueron resultado de las decisiones, buenas o malas, que nuestros padres y abuelos tomaron un día.

Todos los días tomamos tantas decisiones, desde decidir si te levantas al escuchar tu alarma o la apagas y sigues durmiendo cinco minutos más (que, la verdad, nunca son sólo cinco minutos), me baño o no me baño, qué pantalones me pongo, qué zapatos, me peino o no me peino. Qué voy a desayunar, o mejor no desayuno. Café o té. Y esas decisiones definen muchas veces el curso del día que apenas vas comenzando.



Pero hay otras decisiones que no sólo afectan un día, afectan el resto de tus días. Cómo, cuándo, dónde, quién, qué, porqué… y la lista sigue y sigue.

Y unas de las más importantes resulta ser: Quién?

Si, quién.

¡La pregunta del millón!

Quién te rodea? Quiénes son tus amigos? Con quién pasas la mayor parte del tiempo? En quién confías? Y con quién haces tu vida todos los días?

Nunca subestimes lo importante que es rodearte de buena compañía. Rodéate de personas que te retan, te hacen crecer, te animan, te apoyan, creen en ti, te confrontan en tus errores y te hacen crecer; de los que pueden ser un refugio en tiempos complicados, que cuando te caes te levantan y que te aman igual cuando estás por los suelos y cuando estás en la cima del éxito. Y, por favor, aléjate de aquellos que te absorben, te hacen menos, te arrastran a lo peor y te animan a seguir en fracaso.

No se trata de encerrarte en una burbuja de buenas y perfectas personas, pero escoge bien a tus más cercanos, a tus íntimos, a los que llenan tu vida de lo bueno. Dicen por ahí que uno termina siendo como las cinco personas con las que más tiempo pasa. Porque las actitudes, pensamientos, gustos, sueños, modales y hábitos se contagian quieras o no.

Y en el quién, esta el gran QUIÉN

Con quién vas a pasar el resto de tus días? Quién va a ser la primer persona que veas al despertar y la última antes de dormir? Quién va a estar ahí celebrando tus victorias y confortándote en las derrotas? Quién va a disfrutar contigo tus mejores momentos y a atravesar contigo los más difíciles?

Y la cuestión es que la decisión final está en ti, y para eso dejo algunos puntos que creo vale la pena tomar en cuenta a la hora de decidir quién, seas hombre o mujer:

1.     Encuentra a alguien que te haga reír
La vida a veces se pone muy seria, necesitas a alguien que pueda poner una sonrisa en tu rostro y hasta sacarte una carcajada en esos días que todo parece estar saliendo mal.

2.     Encuentra a alguien con energía.
Nadie quiere pasar el resto de su vida con un holgazán. Encuentra a alguien con energía, con ganas de hacer algo divertido en medio de la rutina diaria en la que fácilmente nos sumergimos; alguien a quien aún después de un largo día de trabajo le queden ganas de pasar un buen rato.

3.     Encuentra a alguien que te atraiga.
No hablo de que busques al típico estereotipo de belleza que Hollywood nos da. La verdad es que todos somos atractivos para alguien. No importa si para el mundo entero es la persona más fea, importa que para ti sea la mas persona más hermosa.

4.     Encuentra a alguien que no busque competir contigo.
Esta sociedad esta llena de competencias, todos quieren ser mejores que el vecino. Y vivir compitiendo con tu pareja es deprimente. Busca a alguien que esté orgulloso de tus logros, que festeje cuando ganes y sea feliz con cada uno de tus éxitos.

Creo que si encuentras a alguien así te espera una vida mucho mejor que el estándar que dicta la sociedad, y si ya lo tienes… no lo dejes ir!



domingo, 16 de marzo de 2014

Edad de Merecer...


Buenas buenas!

Espero que se encuentren de lo mejor!, yo!? Feliz porque cada vez hay mas gente que nos lee desde diferentes partes del mundo!, Saludos a españa!, polonia! Costa Rica! Francia! Australia! USA! y demas!

Bueno, "a lo que truje chencha". 

Tal pareciera que, desde que abrimos el blog, cada dos o tres días, surge alguna situación en la vida que me inspira a escribirles acerca de un tema en especial... aunque creo que poco a poco, el Blog se centra mucho en la "soltería" jaja, porque será?

Pues asi las cosas, les cuento, el día de hoy, me pasó algo muy simpático, o irónico, u ofensivo, o aun no se como catalogarlo, en la oficina. Una amiga me empezó a hacer preguntas, tales como: ¿Porque no tienes novia? ¿ y Cuando vas a tener?, ¿porque? etc... seguidas de frases mas sugestivas como : "deberíamos de conseguirte una novia… leyeron bien; “CONSEGUIRTE!” Ja!

Pero entre toda su platica, de la cual me mofe cada segundo, y ante la cual mostré ese desdén característico que suelo mostrar cuando alguien saca a colación mi "soltería" me dijo algo que me llamo mucho la atención... y es que, a todo esto, en cierto momento le pregunte: "cual es tu afán de conseguirme novia?... Como para que?"

Respuesta:?

PORQUE YA ESTAS EN EDAD DE MERECER...








Oh…
Dear…
Lord…








Es verdad lo que escuché?... Si, y sin importar que estuviera en las oficinas de mi trabajo, no pude mas que soltar una buena y rotunda carcajada. Y le dije que estaba loca, que yo estaba muy feliz siendo libre y sin rendirle cuentas a nadie. Me di la vuelta y salí de su oficina en dirección a mi escritorio.

"Edad de merecer"...

Bueno, durante las siguientes horas, pensé y pensé, le di vueltas y mas vueltas a la frase en mi cabeza. Edad de merecer... De merecer qué amigos?

De merecer cariño? De merecer amor? De merecer... una novia?
POR FAVOR! 

Soltero por convicción, no por falta de oportunidad!

Si me leíste en mi primer entrada "Arroz con leche... me quiero casar?" entenderás por completo todo lo que pensé en ese momento...

Vamos, a todo esto, conozco el trasfondo de su platica, y de su interés en "conseguirme una novia", resulta que conoce a una muchacha, que dice estar interesada en mi... Llamémosla Laura. (guapo, algo y codiciado, recuerdan? ja...ja...) y supongo que quiere ver si "pico el anzuelo" y me intereso en algún "prospecto" que me proponga...entiéndase, Laura.

Yo conozco, a Laura, trabaja en la misma empresa, con nosotros dos, prácticamente nueva.  Es una chica buena onda, guapa y simpática, en lo personal, me gusta su risa y su inocencia, su naturalidad. Seria un buen partido; pero...

 "Gracias, pero no gracias"


Verán, por diferentes causas, en mi vida he elegido la soltería una y otra vez. Pero al parecer eso simplemente no le cuadra a mucha gente, ahora que lo pienso, no se porque en mi familia (afortunadamente) jamás ha sido tema de conversación este curioso “lifestyle”

Pero si, hay mucha gente que no entiende que alguien simplemente decida no tener ninguna relación de momento. Por los motivos que sean. Pero las cosas han cambiado, y cambian constantemente, se que hoy en día hay mas gente que prefiere formalizar una relación ya en una edad de mas “madurez”. Sin embargo, antes no era así, mi madre por ejemplo, a mi edad ya me cargaba en brazos. Si siguiera su ejemplo me debería haber casado un año y medio atrás.

Mi abuela? Creo que a mi edad ya tenia 2 hijos, y volvemos a lo mismo,  si siguiera su ejemplo, me hubiera casado hace algunos 5 años.

Y mi mas reciente descubrimiento…
         Romeo y Julieta. Espero que se hayan dado la oportunidad de leerlo por gusto, a una edad razonable, en la que aprecien cada palabra y cada detalle de la obra. Shakespeare enamorador!. Que obra tan más maestra!

Puedo ser un romántico empedernido, y esta obra es la prueba escrita de ello. Hace unos días, la leí por tercera vez en mi vida, y si bien la amé una vez mas, y la recité, por puro placer, en voz alta sus mejores versos como: “Romeo, romeo, porque eres tu romeo…” o bien “Sal, hermoso sol, y mata de envidia con tus rayos a la luna..”

Esta vez, por primera vez, repare en el hecho de que la historia es un “amor adolescente”, Julieta no cumplía sus 14 años cuando “abrevió el dulce hierro de una daga, y lo descansó sobre su pecho… por amor”

Entonces, acordamos que los tiempos cambian, y la visión de las personas también, yo por ejemplo cuando estaba pequeño pensaba que a mis 24 años seguramente ya estaría casado, cuando cumplí 21, decidí que los 35 años serian excelentes para casarme… y bueno, hoy en día quisiera casarme a los 30… pero casi cumplo 25.


Eso quiere decir que  mi “edad de merecer” cada vez se ve mas reducida, y que debería empezar a preocuparme por ello…
o… no?



Ustedes ya están en edad de merecer? A que edad quisieran casarse?
Gracias por sus minutos de lectura! Espero lo disfrutaran!

Myke P.

miércoles, 5 de marzo de 2014

Dos Opciones.


Todos tenemos dos opciones en la vida : aceptar las cosas como son o aceptar la responsabilidad de cambiarlas. 


Hace tiempo leí por ahí algo que se me quedo muy grabado: Como pienses es como te vas a sentir, como te sientas es cómo vas a actuar, como actúes es como serás percibido por los demás y como seas percibido por los demás es como serás recordado.

Y en algo estoy completamente de acuerdo: como pienses es como te sentirás. A diario tenemos que tomar una elección, la elección de sentir lo que queremos sentir. No tiendo a compartir cosas que yo misma nunca haya experimentado. Pero esto no quiere decir que esta es una idea o manera de ver las situaciones que yo haya conquistado al 100%. Normalmente soy una persona positiva y en general me siento bien conmigo misma. De vez en cuando me dan bajones y me ahogo en un vaso de agua. Y cuando me llega el momento de claridad yo sola encuentro la solución: es mi culpa el sentirme de la manera que lo hago porque soy la única en este mundo que está en mi cabeza. Soy la única en este mundo que puede controlar mis sentimientos.

Es fácil ir por ahí culpando a la vida o a las personas por cómo nos sentimos. "Es que Chonito me ofendió o Chuchita me dijo tal o cual cosa y por eso estoy triste o enojada." Pues sabes que?: Pamplinas! Por eso choco tanto con algunos psicólogos, están aferrados a adjudicar tus actos, pensamientos y sentimientos a alguien más, sea a tus padres, a tus amigos, a tus compañeros de trabajo, a tu religión, a tus maestros, a quien sea… cuando la entera responsabilidad debería caer en uno mismo. Nadie tiene el poder de hacerte sentir mal porque tú tienes la opción de creer o no en las palabras que recibes. Tu tienes el poder sobre tus pensamientos una vez que los controlas. 

También es fácil achacar nuestros sentimientos a las situaciones que no solicitas. Por eso digo que solo hay de dos aguas: la aceptación o el cambio. La aceptación de las cosas como son no significa aceptar la derrota, a veces significa que tú eres lo suficientemente inteligente como para saber cuándo hay que renunciar a una situación malsana. A veces esto significa aceptar a las personas y situaciones como son. Y esto te quitara un gran peso de los hombros. Si no quieres, entonces tendrás que optar por el cambio. Siempre esta la posibilidad del cambio. 

Un cambio de vida no se realiza durante la noche, es un proceso gradual y se necesita tiempo. Tardamos de 4-5 años para obtener un título profesional, ya que es una serie de pasos y lecciones que tienen que aprenderse en el camino para obtenerlo.  Es lo mismo con la vida, el conocimiento y la sabiduría a veces vienen a costo de unos pocos errores, pero siempre y cuando aprendamos y crezcamos de la experiencia, ¿qué daño podríamos realmente sufrir?

Asumamos la responsabilidad de cambiar las situaciones o aceptemos como son y dejemos de quejarnos de una buena vez.

Espero leerlos pronto.

Lisa